jueves, 4 de febrero de 2016

Etapa teta: superada! Comenzamos con BLW

No he abandonado el blog, no.. Más bien he abandonado mi vida.

Y es que con la llegada del año nuevo, he comenzado otros proyectos (trabajo básicamente) que me quitan todos los minutos libres que arañaba a la semana. Y no doy más de sí!!

En tan sólo un mes desde la última vez que escribí han pasado tantas cosas, que al final por no saber por dónde empezar, no empiezo por ninguno! Pero quizá lo más reseñable sea que por fin puedo decir que hemos superado con nota la lactancia!

Sí.. Parecía que nunca llegaría este día, no veía la luz al final del túnel, y he de reconocer que en muchas ocasiones se me ha hecho un poco cuesta arriba mantener mi decisión de continuar con la lactancia materna de manera exclusiva, e incluso puedo afirmar que no he podido disfrutarla como muchas madres dicen: Hasta ahora.

Desde pequeñita he sido una rebelde que se niega a las imposiciones, y falta hacía que sea la única manera de que el bebote se alimentase para que en mi cabeza todo fueran agobios. Y en realidad no ha cambiado casi nada, ya que sigo teniendo al peque enganchado 24 horas al día, pero simplemente saber que tienes la posibilidad de que coma otras cosas ya relaja bastante.

Una de las cosas de las que me informé durante el embarazo es sobre la alimentación del bebé pasados los 6 meses (edad a partir de la cual la OMS recomienda comenzar a introducir la alimentación complementaria) y me llamó mucho la atención el método del Baby led Weaning. 

Estamos acostumbrados a pensar que los bebés sólo se alimentan de biberones o papillas, y para muchos es inconcebible imaginar a un bebé al que ni le asoman los dientes comer sólidos. Pero es increíble lo sabia que es la naturaleza y lo hábiles que somos para gestionar desde tan pequeños los nuevos retos.

El baby led weaning consiste en dejar que el bebé marque el ritmo, y él mismo autorregule la alimentación y la introducción de los alimentos. Para ello, "deben" cumplir varios requisitos:

  • Que el bebé se mantenga sentado.
  • Que el reflejo de extrusión haya desaparecido (Que ya no escupa las cosas automáticamente).
  • Coordinación mano-boca.
  • Mostrar signos de hambre o saciedad (Si el bebé quiere comer abrirá la boca y si por el contrario ya no quiere más se apartará o cerrará la boca).
  • Y por último y yo diría el más importante: Que muestre interés por la comida.
Y digo que el más importante porque no todos los bebés están preparados al mismo tiempo, por ello no hay que forzarlo. Hay bebés con 8 o 10 meses que no muestran ningún interés por los alimentos y pueden seguir hasta el año a base de pecho. Aunque es cierto que las reservas de hierro bajan a partir de los 6 meses y que se ha demostrado que la introducción de determinados alimentos antes de los 7 meses reducen la posibilidad de desarrollar alergia.

El caso, es que mi experiencia con el baby led weaning comenzó exactamente el día después de que el peque cumpliese los 4 meses. Cuando estoy en casa, acostumbro a llevarle en la bandolera, la mochila, o el fular para poder hacer cosas a la vez. Ese día iba a preparar ensaladilla rusa y estaba cocinando la zanahoria y la patata al vapor.  Y cuál es mi sorpresa cuando al coger un trozo de zanahoria para probar si ya estaba hecha, el enano, estiró su bracito y cogió el trozo, y mirándome a los ojos, como esperando un gesto de aprobación se lo acercó a la boca y comenzó a succionarlo como si fuese el pecho.

Yo, como imagino que todo el mundo la primera vez que se encuentra en esa situación, ni respiré. Había leído mucho sobre ello, pero en ese momento sólo pensé "Ay, que se me va a atragantar". Pero no fue así. De hecho, acabó tomándose (y restregándose por la cara y la ropa) varios trocitos más, sin dejar de abrir los ojos como platos y con una sonrisa de oreja a oreja.

Y así, desde aquel día, su interés por la comida ha ido creciendo hasta el punto de que a veces es un peligro tenerle cerca mientras comes porque la velocidad con la que coge las cosas y se las lleva a la boca es tremenda (Lo de mirarme y esperar aprobación ya es una cosa del pasado!).

Después de la zanahoria vino el plátano, la patata, la quinoa, el arroz, la naranja.. Y así poco a poco va ampliando su repertorio. Ahora mismo tiene 5 meses y medio y tan sólo un día ha comido puré (zanahoria, patata y arroz) y cuando llevábamos unas pocas cucharadas decidió que era mejor meter la mano entera y después quitarme la cuchara y experimentar por sí mismo.

Y eso es lo mejor de todo. La experimentación. El juego. Ver esa sonrisa de felicidad por algo tan simple como ir descubriendo nuevas texturas y sabores. 

Hay a quien le echa para atrás porque es un método que "ensucia mucho". Desde mi punto de vista merece la pena, y tampoco es algo excesivamente llamativo (Aunque he de decir que mi perra está encantada con esto, y espera pacientemente a que caiga algún trozo de comida)

También he oído a quien opina que es mejor dar los purés de toda la vida para "asegurarte de que esté bien alimentado", pero es que hay que pensar que esto es un complemento de la lactancia y no un sustituto. De hecho, se recomienda siempre dar el pecho, a demanda, como hasta ahora y después ofrecer el alimento y que el bebé coma lo que quiera, sin forzar. 

Conclusión: Una vez más podemos afirmar que la naturaleza es sabia, y estamos totalmente preparados para esto, tan sólo hay que perder el miedo y confiar en el bebé. Es una experiencia preciosa, muy gratificante y divertida. (Que se lo digan a mi perra!!). :P

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